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Historia
La Tierra de Israel, conquistada desde el siglo XVI por los turcos, experimentó un cambio radical entre los años 1831 y 1840, cuando Egipto tomó control de estas tierras. Egipto mostró interés en atraer a las potencias europeas, lo que provocó una apertura que el Imperio Otomano no había sabido implementar. Cuando Turquía recupera el territorio en 1840, se da cuenta de que el "tren ya dejó la estación", y ahora solo queda mantener una política de apertura.
Prusia e Inglaterra fueron quienes ayudaron al Imperio Otomano a recuperar el poder, y algo que une a ambas naciones es su religión protestante. Por esa razón, reclamaron al entonces sultán otomano el derecho de establecer una representación protestante junto a la ya existente cristiana. La primera presencia protestante se estableció en la zona de La Puerta de Jaffa en Jerusalem, y solo en el año 1868 llegaron los Templeros protestantes a las tierras de Israel, primero a Haifa y Jaffa, y luego en 1873 a Jerusalem, específicamente al Valle de los Fantasmas.
Los Templeros: Aunque su nombre podría confundirse con los Templarios cruzados, los Templeros eran un grupo originado en el sur de Alemania, fruto del pensamiento de Christoph Hoffman y Georg Hardegg. Ellos fundaron una escuela de pensamiento protestante que sostenía que "el templo" reside en cada persona, por lo tanto, no era necesario construir iglesias para rezar. Este movimiento fue perseguido por la corriente principal del protestantismo, lo que los llevó a buscar un lugar de refugio que también coincidía con su fe: acercarse a Tierra Santa.
El asentamiento protestante floreció hasta la llegada del Mandato Británico, cuando la mayoría de los residentes fueron expulsados por pertenecer a un país enemigo. Pocos años después, muchos regresaron a sus hogares en Tierra Santa.
En los años 30, con la aparición del nazismo en Alemania, gran parte de los residentes —ya segunda generación de aquellos pioneros— se afiliaron al partido nazi. Esto llevó al Mandato Británico a expulsarlos definitivamente, enviándolos a Australia. Hoy en día, el asentamiento se ha convertido en un barrio residencial de Jerusalem, y los edificios que quedan son testigos de la historia de los Templeros y su influencia en la ciudad. -
La casa del Pueblo:
Recordamos que la esencia de los templeros era no tener un lugar específico para rezar...
Recordamos que la esencia de los templeros era no tener un lugar específico para rezar, ya que el templo estaba en cada uno de ellos. Este lugar no era un sitio de oración, sino de encuentro. Después de la jornada laboral o de reuniones comunales, se reunían aquí. Los domingos por la mañana, se congregaban para escuchar el sermón del pastor o cantar canciones litúrgicas.
Iglesia de Armenia: Hoy se puede ver la cruz Hashkar de la congregación cristiana de Armenia asomando en el techo de esta casa, lo que indica que actualmente es una iglesia armenia, aunque no está en uso. -
El nuevo liceo:
Escuela de templers, fundada a fines del siglo XIX como ampliación del viejo liceo...
Escuela de templers, fundada a fines del siglo XIX como ampliación del viejo liceo. Este nuevo edificio fue construido para responder al crecimiento de la comunidad templera en Jerusalem y la necesidad de una educación más estructurada para sus hijos. El liceo ofrecía una formación académica moderna para la época, con énfasis en ciencias, idiomas, y valores comunitarios. Aunque no incluía instrucción religiosa formal, reflejaba los principios templeros de disciplina, autosuficiencia y conexión con la Tierra Santa.
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La casa de Matthaus Frank:
La primera casa fundada en el Valle de los Fantasmas.
Pertenecía al molinero Matthaus Frank, quien llegó a estas tierras enviado para comprar terrenos en nombre de su suegro, un idealista protestante. Aunque su suegro falleció sin ver el fruto de su visión, Matthaus llevó adelante el proyecto y estableció aquí la primera estación de molino a vapor y una panadería, fundamentales para la autosuficiencia de la comunidad templera.
Frank llamó a su casa "Eben Ezer" (אבן עזר), que significa "la piedra de ayuda", en referencia al lugar mencionado en el Libro de Samuel I 7:12, donde el pueblo de Israel vence a los filisteos. El versículo dice:
“Entonces Samuel tomó una piedra, la colocó entre Mizpa y Shen, y la llamó Eben Ezer, diciendo: ‘Hasta aquí nos ayudó el Señor.’”
Esta casa no solo representa el inicio del asentamiento templero en la zona, sino también el espíritu pionero, práctico y profundamente espiritual que caracterizaba a sus fundadores. -
La casa de Theodor Sendel:
Theodor Sendel fue un destacado arquitecto que participó en importantes obras de infraestructura...
Theodor Sendel fue un destacado arquitecto que participó en importantes obras de infraestructura en Tierra Santa. Entre sus contribuciones más notables se encuentran el trazado del camino de Jaffa a Jerusalem y su colaboración en el proyecto de la Abadía de Dormitio, junto al renombrado arquitecto Conrad Schick.
Sendel también estuvo involucrado en otras obras urbanas y religiosas que marcaron el paisaje de Jerusalem a finales del siglo XIX y principios del XX. Su enfoque combinaba técnicas europeas con sensibilidad local, lo que le permitió crear estructuras funcionales y estéticamente integradas en el entorno histórico de la ciudad.
La casa que construyó en el Valle de los Fantasmas fue una de las primeras edificaciones del asentamiento templero en la zona, y refleja tanto su visión arquitectónica como el espíritu pionero de la comunidad protestante alemana. -
Casa de Theodor Fast:
En esta casa vivió Theodor Fast, hijo de Abraham Fast, propietario del reconocido Hotel Fast...
En esta casa vivió Theodor Fast, hijo de Abraham Fast, propietario del reconocido Hotel Fast en Jerusalem. Theodor trabajó en la empresa encargada de la construcción del tren que conectaba Jaffo con Jerusalem, una obra clave para el desarrollo de la región en el siglo XIX.
Además, fue maestro de conocimiento sobre la Tierra de Israel en la escuela de los templers, donde enseñaba geografía, historia y espiritualidad vinculada a la tierra santa, formando a las nuevas generaciones de colonos templeros.
Segunda Guerra Mundial: Durante el conflicto, Theodor Fast fue expulsado a Australia por las autoridades del Mandato Británico, al igual que muchos otros residentes templeros, debido a su nacionalidad alemana.